TEMPLOS DE LA CORPORACIÓN
Hijas de la avaricia
Imperio de caníbales
¿Hasta cuando dejarán de comerse a los más chicos?
Sus presencias plastifican las ciudades
Arrancan el pan de las bocas
De los hijos del artesano
Sí
Ustedes fornican con automóviles
Son una maquina que arroja zombis
Por sus puertas automáticas
Con sus guardias de seguridad letárgicos
Por falta de significado
Monstruos crueles
En orgías de plástico
Ya no destruyan las comunidades del mundo
Donde ustedes están
Está la muerte
Sus estructuras abominables
Son templos de locura
Dejen de vender mentiras
No es cierto que los Yanquis los aman
Los retoños de Walt Whitman también los detestan.
Mis hijos y yo veíamos como se quemada una de sus tiendas
El techo soltaba bocanadas
El humo me recordaba un ritual de purificación
Para los niños era mejor que un conjuro de Hollywood
Mis niños gritaban con entusiasmo al escuchar en la lejanía
Las sirenas de los bomberos
Hurry up! Hurry up! Hurry up! Yo sólo sonreía.
Los compradores al ver el incendio
Se apresuraban a introducirse al edificio para poder comprar rápidamente
Para satisfacer su adicción por las cosas
Para poder justificar su existencia
Uno de ellos gritaba:
¡El que muera con más cosas gana!
Sunday, November 30, 2003
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